La Granja de la Hermilda, origenes de San Vicente
Este año se cumplen el 735 aniversario de la población de San Vicente. Todo comienza cuando la abadia de San Andrés de Espinareda otorga carta de población a varios vecinos para que se instalen y construyan una granja en 1289. Esta se ubicará aguas a bajo del rio Cúa y un poco más arriba del actual asentamiento de la localidad. Denominandose la Hermilda. Siendo esta una manera frecuente de asentar población. Recordemos que tambien existirán granjas en Moreda, Ocero, Espanillo, Sancedo, Narayola, Fresnedo, Berlanga, Argallo y así hasta llegar a las 28 en el Bierzo. Muy por encima del Monasterio de Carracedo, que solo cuenta con 15. A pesar, de ser el mas rico e importante, dada su ubicación. Destinándose según su localización a distintas actividades. Así, las ubicadas en el Bierzo bajo se ocuparan de la producción de vino y sus deribados principalmente. Las de la montaña o brañas al sector ganadero y las demás a los cereales. Pero no descuidando la producción de frutos menores y algunos ganados. Siendo esta una manera de poner zonas baldias en producción. Y a la vez, organizar e impedir la concentración de los mismos productos. Que junto con yunquerias, caserias o casares y canama formaban las unidades o formas de gestión agraria del monasterio de Espinareda.
Sus arrendatarios además de pagar los réditos del foro, estaban obligados a permitir la corta de madera en los bosques que comprendía la mencionada explotación. Para el priorato de San Juan de la Mata, el monasterio y la casa de Espanillo. Para lo cual, los que fuesen a talar, tenian que portar un permiso del abad o del prior de las distintas casas que tenian derecho. So, pena de multa, por no llevarla o por impedirla.
Con los años y la roturación de tierras, se fueron asentando nuevos vecinos en su actual ubicación, fuera de la granja. La mayor parte de estos estaba formada por los hijos de los arrendatarios. Pero también, por el personal que ayudaba de manera discontinua en las labores de la granja. En la gestión de los animales, el laboreo de las tierras e incluso en labores domésticas. Conformandose una nueva localidad, con el barrio anexo de la Retuerta. Por su ubicación y el poco terreno disponible para el cultivo, dada su orografía. Sus esfuerzos se destinaban al ganado cabrio y lanar principalmente. Complementando por la producción de castañas y algunos cereales. Ya que el frio y las pocas horas de sol de la localidad, hacían imposible el cultivo de frutales de manera habitual. Si bien, su cercania con el rio le permitia relizar pesquerias.
En 1799 la localidad de Vega de Espinareda pagó a las localidades de San Vicente y el Valle de Finolledo. Para poder disponer de unos terrenos, los cuales pertenecian a la granja de la Hermilda. En 1835 los vecinos de San Vicente y la Retuerta pagan 440 reales, en moneda de oro y plata al Padre Fray José, del monasterio de Espinareda. Conforme a los réditos del principal de la granja de la Hermilda. Quedando por libres y exentas las dichas fincas hipotecadas.